Ingredientes:
– 4 patatas medianas
– 60 grs de queso azul, puede ser Roquefort, Gorgonzola…
– 6 chalotas
– una cucharada de azúcar moreno
– una cucharada de nata ligera
– una cucharada de mantequilla
– sal y pimienta negra recién molida

Preparación:
Procuramos que todas las patatas sean más o menos del mismo tamaño. Se frotan con un cepillo, las enjuagamos y se secan. Enteras y sin pelar, se cuecen al vapor hasta que queden “al dente”. Cuando estén, las dejamos enfriar. A continuación, en una sartén preparamos el relleno. Calentar la mantequilla y pochamos a fuego muy suave las chalotas cortadas en tiras lo más finas posible. Tapamos y dejamos unos diez minutos.

Pasado este tiempo, espolvorear el azúcar, agregar una pizca de sal y pimienta recién molida y dejamos al fuego unos minutos más para que quede una textura melosa. Volcar en un cuenco y dejamos enfriar. Mientras, en un bol, machacamos el queso azul con la cucharada de nata y una pizca de pimienta molida. Trabajar con un tenedor hasta que tengamos una pasta.

Luego, abrir las patatas a lo largo, procurando no separar las dos mitades. Ahuecar ligeramente el corte y rellenar con las chalotas confitadas. Precalentar el horno a 240 grados. En el último momento, repartimos sobre las patatas unas cucharadas de queso azul y gratinamos, tres o cuatro minutos, hasta que se forme una costra en la superficie. Servir enseguida, antes de que se enfríen y acompañar con una ensalada de lechugas variadas.

Esta receta es original del blog “¿Qué comemos hoy?” de Laura Vichera.