Ingredientes:

Para las albóndigas

– 500 g de carne picada de pollo
– Media cebolla
– 1 huevo
– 1 diente de ajo
– 1 cucharada de pan rallado
– Un chorrito de sidra
– Perejil

Para la salsa

– Media cebolla
– 1 zanahoria rallada
– 1 manzana
– 1 vaso de sidra natural
– 2 vasos de caldo de pollo

Elaboración:

Picamos el perejil, el ajo y la cebolla y lo mezclamos con la carne. Añadimos también un huevo, una cucharada de pan rallado y un chorrito de sidra. Mezclamos hasta que todos los ingredientes estén lo mejor integrados posible y guardamos la mezcla en la nevera durante 30 min o 1 hora, para que la carne coja sabor. Pasado ese tiempo, preparamos las albóndigas cogiendo porciones de carne, dándole forma con las manos y pasándolas por harina. Freímos las albóndigas en una sartén con abundante aceite bien caliente y, una vez listas, las dejamos sobre papel absorbente para que suelten el exceso de aceite.

Por otro lado, preparamos la salsa. Picamos la cebolla y la ponemos en una sartén a fuego medio con un chorrito de aceite, hasta que se poche y empiece a transparentarse. Pelamos y rallamos una zanahoria, pelamos y troceamos una manzana y, cuando la cebolla esté lista, añadimos ambas a la sartén. Subimos un poco el fuego y salteamos un par de minutos. Agregamos un vaso de sidra natural y dejamos unos minutos para que se evapore el alcohol. Añadimos también dos vasos de caldo de pollo y, cuando rompa a hervir, bajamos el fuego y metemos las albóndigas en la salsa. Dejamos cocinar a fuego lento unos 5 minutos.

Si necesitamos espesar la salsa, añadimos una cucharadita de maicena diluida en un poco de agua. Subimos el fuego para que la salsa hierva y espese un poco. Una vez la salsa esté en el punto deseado, retiramos y estarán listas para servir.

Si quieres ver las imágenes del proceso, pincha aquí para ver la entrada completa en el blog de Guillermo Osorio ‘No me comes nada’.