Ingredientes:
– ½ kilo de carne de pollo, mejor muslos
– 2 calabacines pequeños o uno grande
– 2 huevos
– una cebolleta pequeña
– un diente de ajo
– miga de pan mojada en leche
– unas hojas de hierbabuena picada
– harina para rebozar
– una pizca de curry en polvo
– sal y pimienta negra recién molida
– aceite de oliva

Para la salsa
– 2 cebolletas
– un vaso de Jerez Amontillado
– caldo de verduras

Preparación:
Retirar la piel y la grasa del pollo y lo picamos muy fino con ayuda del robot. Lavar los calabacines, se secan y los despuntamos. Con un rallador o una mandolina hacemos tiras finas y se dejan en un escurridor con un peso encima para que suelten el agua. Luego, volcar la carne en un cuenco grande y mezclamos con la hierbabuena, un diente de ajo y la cebolleta, todo muy picado. Incorporar el pan bien escurrido y los dos huevos batidos.

A continuación, añadir el calabacín rallado, la pizca de curry, sal y pimienta molida. Trabajar con un tenedor hasta que todo quede bien trabado y dejar un ratito en el frigorífico, así quedará más consistente. Mientras, en una cazuela amplia, vamos rehogando, a fuego muy suave, las cebolletas cortadas en tiras finas. Cuando estén blanditas, añadir el Jerez y dejamos que evapore el alcohol. Agregar el caldo y cocer unos diez minutos. Triturar la salsa y mantener al fuego.

Formar bolitas de masa, que pasamos brevemente por harina y se fríen por tandas. Las escurrimos bien sobre papel de cocina y se van metiendo en la salsa. Sacudir la cazuela, tapar y cocer todo junto unos veinte minutos. Acompañar con trigo hervido o también con pasta larga.

Esta receta es original del blog “¿Qué comemos hoy?” de Laura Vichera.