‘Alimenta tu corazón’, sólo tienes uno…
El trabajo y la velocidad habitual de las ciudades fuerza a veces a dejar de lado la buena alimentación. La dieta mediterránea siempre ha incluído alimentos, bebidas y productos que combinados han ofrecido una alimentación sana, equilibrada y saludable… pero parece que las buenas costumbres se están perdiendo. Por ello, Carmen Garcés y Carlos Lahoz son los autores del libro “Alimenta tu corazón”, que pretende servir de guía para saber gestionar una nutrición y alimentación correctas. Se sirven de un centenar de recetas tradicionales y que fomentan la buena salud siguiendo los dogmas de la costumbre y la cultura alimenticia de nuestra tierra. Las recetas se acompañan con una tabla de composición nutricional.
La obra ya se encuentra en las librerías, y siguiendo lo que se narra en el prólogo es un apoyo que demuestra que “la nutrición no está reñida con la gastronomía, ya que se puede disfrutar comiendo alimentos muy bien preparados y con una base nutricional irreprochable”.
Según Lahoz, uno de los escritores, las enfermedades cardiovasculares constituyen la primera causa de mortalidad en España. Expresa que”existen múltiples factores de riesgo modificables, entre los que se encuentran el colesterol elevado, la hipertensión arterial o la obesidad, que se pueden controlar con medidas higiénico-dietéticas” y para ello ha nacido precisamente Alimenta tu corazón.
En total incluye cincuenta primeros platos de ensaladas, cremas, arroces y verduras, cincuenta segundos de carnes y pescados y veinticinco postres, sobre los que se especifica el aporte calórico, las proteínas, los carbohidratos, los lípidos, el sodio, el calcio, el hierro, la fibra o las vitaminas de cada plato. La obra combina comidas de toda la vida como salmorejo, patatas a la importancia o pollo al chilindrón con una selección de bebidas fermentadas propuestas. Así, las cervezas confluyen con las recetas que contienen elementos ácidos, picantes, ensaladas o ciertas carnes; lo mismo que el vino tinto con las legumbres o el blanco con muchos pescados.
Así, entre las páginas de esta obra, confluyen comidas de toda la vida como salmorejo, patatas a la importancia o pollo al chilindrón que ligan a la perfección con las bebidas fermentadas propuestas. De esta forma, las cervezas armonizan con las recetas que contienen elementos ácidos, picantes, ensaladas o ciertas carnes, lo mismo que el vino tinto con las legumbres o el blanco con muchos pescados.