Aquí la experiencia es un grado. Tradición y aroma se fusionan en su interior. Más de 40 años avalan a la cocina de restaurante Oña. Allá por el año 1969 vio la luz un emblemático bar restaurante que en plena Plaza del Hospital Civil lleva toda una vida conviviendo con los malagueños. Su amplia variedad de productos y sus precios económicos lo convierten en un enclave ideal para disfrutar de una tradicional comida casera con el mismo sabor de siempre. Artesanía, sabor y calidad. Tres claves que el establecimiento ofrece a sus clientes sea cual sea el plato escogido. La oferta culinaria varía a lo largo del año, pero no pierde su exquisitez. “Nos adaptamos a las comidas y productos de temporada, tanto en verano como en invierno” afirma Miguel Ángel Gallardo, encargado del restaurante.

Desde bien temprano, a partir de las 6:00, abre sus puertas para ofrecer desayunos a sus clientes. Churros malagueños, tostadas o bocatas son las estrellas en las primeras horas del día. En cambio si prefiere acudir a medida que avance la mañana, en su interior podrá encontrar tapas y raciones de lo mejor de la gastronomía regional. Más de 20 entrantes diferentes se pueden saborear en el establecimiento. Sin duda, el plato estrella es su paella mixta aunque también la especialidad de la casa son los callos y pescados del día. Un sitio perfecto para picar algo. Si el hambre va en aumento aquí podrá disfrutar de una completa comida. El restaurante dispone de una carta amplia que mimetiza la esencia de su interior: productos artesanos y de primera calidad. Por otro lado, si el visitante lo prefiere puede optar por el menú. Diariamiente el local sirve comidas caseras a un precio muy económico. Por 7,60 el cliente tiene la posibilidad de elegir una carta variada de productos. Dos platos, bebida y postre. “Disponemos de una gran variedad de productos artesanos, comidas de toda la vida. Magníficos platos caseros, como si almorzaras en tu propia casa”, asegura Gallardo.

Resataurante Oña mantiene una peculiaridad. Una seña de identidad. El sabor de sus productos desprende una fragancia malagueña. Sus pescados del día son recogidos en las aguas de la Caleta de Vélez y son tratados con mimo por su cocina. No sólo en el pescado podemos captar este toque si no en las verduras y demás productos de la huerta. Todos ellos proceden de Málaga y la provincia. En definitiva sus generosas raciones en cada uno de los platos sacian el apetito de cualquier comensal. Todo ello en un salón bastante amplio y que destila un ambiente familiar. Además, de la sala y la terraza exterior, el establecimiento dispone de una zona reservada por si el cliente quiere celebrar en su interior algún acontecimiento. Desde comuniones, bodas o bautizos hasta cualquier festejo que estime necesario.

Oña
Plaza del Hospital Civil
Málaga