Ingredientes:
– medio kilo de harina de repostería
– 80 grs de azúcar blanca
– 2 cucharaditas de levadura
– 80 grs de mantequilla media sal
– 2 huevos
– 200 mls de leche
– medio vasito de nata ligera
– una tira de piel de naranja
– 2 clavos de olor
– un puñado de pasas sin semillas
– un puñado de avellanas tostadas
– una pizca de sal

Preparación:
En un cazo ponemos a calentar la leche con la nata, la tira de piel de naranja y los dos clavos de olor. Antes de que comience a hervir, apartamos y dejamos templar tapada, para que se mezclen los aromas. Con el mortero machacamos las avellanas y las dejamos en trocitos. Se doran en una sartén, sin nada de aceite y las reservamos hasta el momento de utilizarlas. Precalentar el horno a 190 grados.

En un cuenco, batimos los huevos y le vamos añadiendo la leche colada, poco a poco. A continuación, incorporar las pasas y dejamos reposar para que se hidranten. Aparte, mezclamos el azúcar y la harina tamizada con la levadura. Agregar una pizca de sal y la mantequilla en trocitos. Vamos trabajando hasta que tengamos una masa granulosa que podamos trabajar con los dedos.

En el centro, hacemos un hueco e incorporamos la mezcla de huevos, leche y pasas y trabajamos ya todo junto. Volcar en la encimera, amasamos para que todo quede bien trabado y estirar con el rodillo, dejando la masa de un espesor aproximado de dos centímetros. Con un vaso o un aro de emplatar pequeños, sacamos piezas de unos seis centímetros de diámetro y las vamos colocando sobre una bandeja forrada con papel sulfurizado ligeramente engrasada. Espolvorear las avellanas y hornear durante quince minutos. Una vez hechos, dejamos enfriar sobre una rejilla.

Esta receta es original del blog “¿Qué comemos hoy?” de Laura Vichera.