Ingredientes:
– 600 grs de gambas hermosas peladas
– 2 limas
– 50 grs de cacahuetes sin sal
– 2 aguacates en su punto
– 2 hojas de gelatina
– 100 mls de nata ligera
– unas hojas de culantro y hierbabuena
– una pizca de harissa (salsa picante marroquí)
– sal y pimienta negra molida
– aceite de oliva

Preparación:
En primer lugar, preparamos la crema con la que acompañaremos las brochetas. Pelar los aguacates, retirar los huesos y se trocean. Los pasamos a un cuenco y añadimos un puñado de hojas de culantro y hierbabuena muy picadas y también el zumo y la ralladura de una de las limas. Machacamos con un tenedor hasta obtener un puré. Luego, en un cuenco con agua fría y unos cubitos de hielo, ponemos a remojar las hojas de gelatina hasta que se ablanden. Calentar ligeramente la nata y dejamos dentro la gelatina bien escurrida.

Cuando se deshaga, colamos la nata y la incorporamos al puré de aguacate. Agregar la pizca de harissa, mezclamos enérgicamente y dejamos en el frigorífico hasta el momento de consumir. A continuación, picar los cacahuetes y se mezclan en un plato con un chorrito de aceite de oliva, zumo y ralladura de lima, sal y pimienta negra molida. Con la punta de un cuchillo, retirar la vena dorsal de las gambas. Las ensartamos en unas brochetas y las rebozamos en la mezcla de cacahuetes. Presionar para que quede bien adherido.

Justo antes de comer, calentar la plancha y asamos las brochetas a temperatura alta, dándoles la vuelta para que queden doraditas por todos lados. Servir recién hechas y acompañar con unas cucharadas de crema de aguacate y una ensalada de tomates cherry.