Ingredientes:
– una coliflor mediana
– 150 grs de jamón serrano en lonchas finitas
– una cucharada de mantequilla
– sal y pimienta negra molida

Para la crema
– 2 cebolletas
– 2 cucharadas de harina
– 2 cucharadas de mantequilla ligera
– un vasito de leche desnatada a temperatura ambiente
– una pizca de nuez moscada
– unas hebras de azafrán
– queso Emmental o Gruyère rallado

Preparación:
Una vez limpia la coliflor, la separamos en ramilletes, los enjuagamos y los escaldamos en agua hirviendo con una pizca de sal. Procuramos que no se ablanden demasiado y luego los dejamos escurrir. A continuación, engrasar una fuente honda, de horno, con la cucharada de mantequilla. Envolver los ramilletes de coliflor en tiras anchas de jamón y se colocan en la fuente.

Luego, en una sartén grande calentamos las otras dos cucharadas de mantequilla. Picar muy finas las cebolletas con las hebras de azafrán y las rehogamos a fuego muy suave. Precalentar el horno a 220 grados. Cuando estén blanditas, espolvorear la harina y la tostamos bien. Agregar una pizca de nuez moscada, sal y pimienta negra molida.

Poco a poco, vamos incorporando la leche, sin dejar de mover para que no se formen grumos. En el momento que vaya tomando consistencia, apartar del fuego. No debe quedar muy espesa. Por último, napar la coliflor y el jamón con la crema que hemos preparado y cubrir con abundante queso rallado. Metemos en el horno unos veinte minutos y gratinar hasta que la superficie quede bien doradita.

Sugerencia: Podemos igualmente preparar esta receta con brécol o con romanesca.

Esta receta es original del blog “¿Qué comemos hoy?” de Laura Vichera.