Ingredientes:
– 5 puerros hermosos, sólo la parte blanca
– 1 patata grande
– 150 grs de bacalao salado
– un puñado de almendras crudas
– 2 cebolletas
– unas hojas de apio
– un litro de caldo de verduras
– ½ vaso de nata líquida ligera
– una pizca de nuez moscada
– unos tallos de cebollino fresco
– sal y pimienta negra molida
– una cucharada de mantequilla
– aceite de oliva

Preparación:
La víspera, ponemos el bacalao en remojo y, una vez desalado, se enjuaga y lo secamos. Retirar la piel y lo desmenuzamos en migas menudas. A continuación, escaldar las almendras en agua hirviendo, se pelan y luego las fileteamos. Se fríen en unas gotas de aceite, con mucho cuidado de que no se quemen. Se sacan a escurrir sobre papel de cocina y agregamos una pizca de sal gorda. En la misma sartén, saltear las migas de bacalao y se reservan.

En una cazuela honda ponemos a calentar la mantequilla con un chorrito de aceite de oliva y, en primer lugar, rehogar los puerros cortados en rodajas finas, las cebolletas y las hojas de apio muy picadas. Damos unas vueltas para que se vayan ablandando. Pasados unos minutos, incorporar la patata troceada y dejamos que tomen color. Mojar con el caldo caliente, añadir sal y pimienta negra molida, mezclar, tapar a medias la cazuela y dejamos cocer durante cuarenta minutos.

Luego, trituramos y pasar la crema por el chino para que quede más fina. Agregamos la nata líquida, mezclamos con unas varillas, rectificamos de sal y poner nuevamente a fuego suave. En el momento de comer, servir en cuencos o en platos hondos y, sobre la crema muy caliente, repartir unas migas de bacalao, unas almendras y unos tallos de cebollino muy picados.

Esta receta es original del blog “¿Qué comemos hoy?” de Laura Vichera.