La franquicia granadina La Cueva de 1900 continúa ampliando el número de sus establecimientos distribuidos ya por ocho ciudades de España. El último escenario elegido para presentar su modelo de negocio, basado en la cocina tradicional y en la especialidad en jamones y embutidos, ha sido Barcelona. En pleno centro de la Rambla de Cataluña La Cueva de 1900 abrió la pasada semana su octavo restaurante fuera de Granada, que supone la primera apertura de la franquicia en esa comunidad. Esta nueva apertura suma ya doce restaurantes en todo el territorio nacional. Según explica Feliz Fernando Molino, encargado de uno de los establecimiento en Granada, “las ciudades en las que esta franquicia se ha hecho un hueco son Barcelona, Alicante, Valencia, Madrid, Murcia, Jaén, Granada con sus cuatro establecimiento y Málaga con dos”.

La inauguración del restaurante en Barcelona tiene especial importancia en la estrategia de expansión porque ha contribuido a incorporar el catalán a su material promocional. Hasta el momento los establecimien han cubierto la demanda de un público tanto nacional como extranjero en tres idiomas: español, inglés y francés. La Cueva de 1900, avalada por la familia Zurita con más de treinta años de experiencia en la elaboración de productos tradicionales, recoge la costumbre granadina de las tapas y la innovación en su oferta gastronómica. De este modo Emilio Rodríguez, director general de la franquicia, explica que uno de los objetivos es “recuperar los sabores de la cocina tradicional, retomar las recetas y los procesos de elaboración clásicos”. “Nuestra innovación se basa, por ejemplo, en rescatar platos de la vida que ya nadie hace”. La oferta de la franquicia granadina está destinada a un público muy amplio, “tanto los clientes que necesitan comer en la calle a diario como los turistas agradecen nuestra apuesta por fomentar los valores de nuestra tierra a través de la gastronomía”, afirma el director general.

La Cueva de 1900, que nació en 2006 con la apertura de su primer restaurante en Albolote, cuenta ya con 200 empleos directos. La franquicia prevé duplicar esta cifra en dos años y seguir creciendo por el territorio nacional. La prioridad de sus doce establecimientos es ampliar por todas las ciudades de España un negocio que parece prosperar, pese a vivir en un contexto arduo de crisis. Además, a través de estos restaurantes se intenta hacer llegar más allá de la provincia los productos granadinos. En septiembre de este año esperan ya abrir otro establecimiento en Fuengirola. Asimismo, para el año 2012, las predicciones son sumar cinco locales más en distintos puntos de la geografía. Las expectativas son a día de hoy muy esperanzadoras, según confiesa Feliz Fernando Molino, “aunque nuestra ambición es hacer franquicias por toda España, en un futuro si la situación sigue bien saldremos al extranjero”.

Fuente: Carolina Plata, Granada Hoy