El cocinero Ricardo Sanz, del restaurante madrileño Kabuki Wellington aboga por convertir en asignatura la gastronomía para concienciar a los más pequeños de la necesidad de comer sano para combatir la obesidad infantil. En estos días en que la velocidad de la vida actual, la vida sedentaria, la predilección por juegos y diversiones donde el sofá se convierte en el escenario más habitual (sin criminalizar a los videojuegos, y más aún teniendo en cuenta la preocupación de las principales firmas por convertir las consolas en instrumentos más dinámicos y donde la actividad física se tiene en cuenta), y donde el deporte se convierte en un rara avis dentro de las costumbres más habituales de la mayoría de las familias, la propuesta de Sanz puede considerarse un comienzo para gestar una cultura gastronómica saludable.

Sanz expresa que es difícil dedicar tiempo a la  cocina y es necesario que los pequeños “se acostumbren a comer mejor y tengan cada vez más en cuenta lo importante que es la nutrición en sus vidas”.  También ha recordado que Ferrán Adriá ya esta empezando a luchar por este objetivo en el ámbito universitario.