Ingredientes:
– 16 placas para lasaña (pueden ser precocidas)
– un puñado de nueces peladas
– 150 grs de panceta ahumada en un solo trozo
– un calabacín mediano
– un trocito de calabaza
– 3 zanahorias
– una cebolla morada
– 3 champiñones
– unas ramitas de apio
– unas hebras de azafrán
– un vasito de caldo de verduras
– queso tierno rallado
– una taza de salsa de tomate casera
– una taza de salsa bechamel casera
– sal y pimienta negra molida
– aceite de oliva

Preparación:
Antes de empezar, preparar todas las verduras. Las pelamos y se cortan en daditos de tamaño más o menos similar. Retirar la corteza a la panceta y la cortamos en tiras. En una sartén amplia con un chorrito de aceite de oliva,  rehogar todas las verduras, a fuego suave con el azafrán, una pizca de sal y pimienta molida. Pasados unos minutos, cuando las verduras hayan tomado color, agregar el vasito de caldo, tapar  a medias la sartén y cocer durante veinte minutos, moviendo de vez en cuando hasta que el jugo reduzca. Aparte, en otra sartén, sin nada de aceite, saltear los daditos de panceta hasta que estén doraditos. Se sacan y los dejamos escurrir sobre papel absorbente. Precalentar el horno a 150 grados. Sobre el fondo de una fuente repartimos la mitad de la salsa de tomate y colocamos una primera capa de pasta. Encima, unas cucharadas de verduras, un puñado de nueces troceadas y unos taquitos de panceta. Vamos alternando los ingredientes, formando capas, hasta acabar con una última de pasta. Napar con la bechamel mezclada con la salsa de tomate reservada y repartir por encima el queso rallado. En el último momento, hornear durante media hora y gratinamos hasta dorar. Servir enseguida.

Esta receta es original del blog “¿Qué comemos hoy?” de Laura Vichera.