Qué mejor excusa que la celebración de la Feria de Nuestra Señora de la Salud para ofrecer a los clientes un menú dedicado al mundo de los toros, tanto, que los platos se presentan como el cartel anunciador de cualquier corrida. El restaurante El envero ha tenido esta peculiar idea y desde mañana y hasta el próximo domingo ofrecerá a sus clientes una singular carta, en la que en lugar de toreros, las estrellas del cartel son sus platos.
Uno de los responsables de esta singular iniciativa gastronómica es el cocinero del restaurante, Antonio López, quien explica que se trata de ofrecer “platos relacionados con la Feria”. Arroz con carne de toro de lidia o frituras de pescado -siempre fresco y elaborado con aceite de oliva virgen- o raviolis de toro son algunos de los platos que aparecen en la carta de este restaurante que abrió sus puertas el pasado 26 de febrero en el número 21 de la calle Teruel, en el barrio de El Brillante. “Somos un punto de encuentro entre la gastronomía y los vinos”, detalla López, al tiempo que añade el local cuenta con un centenar de referencias de caldos jóvenes, tanto nacionales como de importación. El envero, continuó, “es un sitio donde te dejas llevar”. Uno de los ganchos de esta iniciativa son, sin duda, los carteles. Uno de ellos es color albero y aparece dibujado un toro con la siguiente leyenda: “ven a disfrutar el remate”.
La apertura del restaurante trae otra visión del mundo de la gastronomía en Córdoba. No en vano, El envero -en el que trabajan 11 personas- ofrece la posibilidad de acudir a su gastrobar o a su restaurante. El primero es el más innovador y, según destaca López, consigue combinar “platos desenfadados con los de alta restauración”. Como ejemplo de este nuevo concepto gastronómico pone el de platos tales como la mazmorra de queso de cabra con sorbete de manzana, la ensalada de langostinos templada con tartar de aguacate y vinagreta de tomate o también patatas a lo pobre con huevos rotos y jamón. El local ofrece estos platos a modo de ración tradicional y el precio oscila entre los seis euros de los más baratos a los 10 de los más caros.
Y quien prefiera el restaurante también tiene una gran variedad de platos a elegir. Eso sí, el precio es más elevado y si se quiere salir más que saciado hay que pagar, según López, unos 35 euros por persona. Una de las singularidades del restaurante es que trabaja con proveedores únicos, “por lo que la sugerencias y la posibilidad de cambios en la carta, son factores que mejoran el resultado final”, anota.
Tras cerrar el restaurante Tempura, Antonio López no ha tenido reparos en abrir un nuevo local y empezar una nueva temporada al frente de los fogones de El envero, que también ofrece a sus clientes maridajes, catas, enoturismo, cursos de cocina, show cooking y otras propuestas gastronómicas, pero eso sí, sólo a aquellos que formen parte de su club gastronómico.
Fuente: L. Chaparro, El Día de Córdoba