Ingredientes: 
– 500 grs haria de repostería
– 60 grs azúcar
– 10 grs de sal
– 100 grs de mantequilla
– 90 grs leche
– 40 grs levadura fresca prensada
– 4 huevos

Preparación:
Comenzamos echando la leche en la Thermomix y programamos un minuto a 37º y velocidad uno. A continuación añade la levadura desmenuzada y programa unos diez segundos a velocidad tres. Añade la harina, el azúcar y la sal. Añade los huevos, y programa un minuto velocidad seis. Una vez que tengamos la masa, programa 3 minutos a velocidad espiga. Tras estos minutos, programa otros 2 minutos también a velocidad espiga, y mientras ve añadiendo la mantequilla a temperatura ambiente en trozos mequeños. La masa debe despegarse bien de los bordes del vaso de la Thermomix. Si no es así, ve añadiendo harina y amasando con la velocidad espiga hasta que consigas que no se pegue ni en los dedos.

Déjala reposar en el mismo vaso cerrado durante una hora. (Vais a ver que hasta se sale por el hueco de arriba cuando doble el volumen). Saca la masa y ponla en una superficie enharinada. (Es importante que la masa no se te pegue a las manos para que las bolas queden bien. A mi no me quedaron bien por falta de harina, pero ya lo sé para otra vez). Pon la masa alargada y divídela en seis partes iguales.

Haz seis bolas, y ponlas en un recipiente de unos 24 cm de diámetro engrasado con mantequilla. Deja reposar durante unos 45 minutos hasta que doblen su volúmen tapado con un film. Una vez que hayan doblado su volumen, añade si lo deseas huevo batido por encima con un pincel y azúcar por encima. Precalienta el horno a 200ºC y hornea durante uno 30 minutos. ¡Listo!

Deja enfriar en unas rejillas. Para conservar, guárdalo en una bolsa de plástico o un lugar hermético y seco. ¡Qué disfrutéis!

Si quieres ver las imágenes del proceso, pincha aquí para ver la entrada completa en el blog de Alejandra Cisneros “Tres platos en la mesa“