Ingredientes:
– medio kilo de lomo de salmón fresco en un solo trozo
– 2 batatas medianas
– 2 chalotas
– 2 huevos
– 2 cucharadas de leche
– una pizca de cúrcuma
– ralladura de piel de naranja
– unos tallos de cebollino fresco
– sal y pimienta negra molida
– unos granos de pimienta rosa
– aceite de oliva

Preparación:
Cuando le hayamos quitado la piel al salmón, repasar cuidadosamente para eliminar las espinas que pudiera tener. Luego, lo picamos a cuchillo en taquitos muy pequeños que pasamos a un cuenco. A continuación, aderezar ligeramente con una pizca de sal y pimienta molida y algo de ralladura de piel de naranja. Tapar con film transparente o con papel de aluminio y dejar en el frigorífico durante un rato.

En unas gotas de aceite de oliva, pochar las chalotas muy picadas y a fuego muy suave hasta que estén blanditas. Pelar las batatas y las troceamos. Cocemos al vapor o en muy poco agua durante veinte minutos, aproximadamente. Una vez cocidas, se sacan a un escurridor y dejamos enfriar. En un cuenco, las machacamos con algo más de ralladura de piel de naranja, el sofrito de chalotas, sal y pimienta. Añadir también el huevo batido, la cúrcuma y un hilo de aceite de oliva. Debe quedar un puré espeso. Precalentar el horno a 180 grados.

Sobre el fondo de una fuente rectangular o de unos moldes individuales repartimos los dados de salmón y los presionamos para que queden bien compactos. Cubrir con el puré de boniato, procurando que no queden huecos. Pintar con el otro huevo batido con las dos cucharadas de leche y algo más de cúrcuma. En el último momento, hornear durante ocho o diez minutos y servir enseguida. Adornar con unos tallos de cebollino muy picados y acompañar con una ensalada de canónigos.

Esta receta es original del blog “¿Qué comemos hoy?” de Laura Vichera.