Ingredientes:
– 4 lomos de trucha, limpios de piel
– la parte blanca de dos puerros hermosos
– 6 huevos
– una taza de mayonesa casera
– un vasito de salsa de tomate casera
– un vasito de nata
– unos tallos de cebollino
– algo de pan rallado para el molde
– sal y pimienta
– aceite de oliva

Preparación:
En una sartén grande calentamos un chorrito de aceite de oliva y rehogamos la parte blanca de los dos puerros, picada muy finas. Pochar a fuego muy suave, moviendo de vez en cuando hasta que estén blanditas. A continuación, repasar el pescado para eliminar las espinas que pudiera tener y lo picamos en daditos medianos. Se incorporan a la sartén y saltear a fuego vivo un par de minutos. Apartar del fuego y dejamos templar.

Separar las claras y se montan a punto de nieve fuerte con una pizca de sal. Aparte, en otro cuenco, batir los huevos y añadir la nata, la salsa de tomate, sal y pimienta negra recién molida. Cuando todo esté bien trabado, incorporar el sofrito de trucha y puerros y añadir también unos tallos de cebollino muy picadosmezclar despacio para que el pescado no se deshaga. Agregar también las claras montadas, poco a poco, de modo que no pierdan volumen.

Engrasar ligeramente un molde tipo plumcake con una pizca de aceite y espolvorear con pan rallado. Volcar la mezcla y sacudir el molde para que no queden huecos. Poner sobre otro molde más grande, llenar de agua y hornear al baño María durante una hora aproximadamente. Pasado este tiempo, cuando veamos que está cuajado, sacar y dejamos templar. Volcar sobre una fuente refractaria, cubrir con mayonesa y gratinar a 200 grados hasta que se forme una costra dorada. Servir templado.

Esta receta es original del blog “¿Qué comemos hoy?” de Laura Vichera.