Ingredientes:
– 4 patatas hermosas, de piel firme
– 8 filetes de anchoa en conserva
– 8 chalotas
– 2 zanahorias pequeñas
– 1 cucharada de nata ligera
– queso rallado para fundir
– una pizca de cúrcuma
– sal y pimienta negra recién molida
– una cucharadita de mantequilla
– aceite de oliva

Preparación:
Debemos procurar que las patatas sean grandes y todas más o menos del mismo tamaño. Con un cepillo se frotan bajo el grifo, se secan bien y las envolvemos, por separado, en papel de aluminio. Las asamos en el horno a 210 grados durante cuarenta minutos aproximadamente. Mientras, en una sartén grande, calentar unas gotas de aceite de oliva con la cucharadita de mantequilla y rehogar las chalotas cortadas en tiras muy finas y las zanahorias raspadas y cortadas en dados pequeños. Rehogar a fuego suave, moviendo para que vayan caramelizando.

Cuando veamos que están blanditas y caramelizadas, agregar la nata, mezclar bien y dejamos reducir ligeramente. Apartamos del fuego, agregar la cúrcuma, sal y pimienta recién molida. Escurrir las anchoas, se pican menudas y se incorporan a la sartén. Mezclar y dejamos templar. Una vez hechas las patatas, cuando se enfríen un poquito, retirar el papel y se cortan a lo largo. Ahuecamos la ranura y rellenamos con la mezcla que tenemos en la sartén. Repartir por encima algo de queso rallado y en el último momento gratinar a 200 grados unos ocho o diez minutos, hasta que el queso funda.

Se sirven enseguida y acompañar con una ensalada de rúcola y canónigos.

Sugerencia: Podemos sustituir las anchoas por aceitunas negras picadas, unas alcaparras, unas migas de bacalao o de atún en conserva, las patatas quedarán igual de ricas.

Esta receta es original del blog “¿Qué comemos hoy?” de Laura Vichera.