Ingredientes:
– 3 cebollas dulces (la cebolla dulce se caracteriza porque tiene un sabor suave, suculento, practicamente no pica y no tiene un sabor desagradable al paladar, porque tiene unos bajos niveles de complejos de azufre que es lo que causa precisamente picor, lagrimeo e indigestión)
– 6 huevos
– Sal y Aceite de Oliva Virgen Extra

Preparación:
Pelamos y cortamos las cebollas en juliana. La pochamos en una sartén con Aceite de Oliva Virgen Extra y salamos ligeramente: esto ayuda a que se pochen más rápidamente. Una vez pochadas, cascamos los huevos. A mí me gusta ir removiendo la clara con una cuchara de madera, para hacer que ésta se cuaje, y luego remuevo las yemas dejándolas al punto deseado, que en mi caso es más bien poco hechas (eso al gusto). Rectificamos la sal y servimos.

Esta receta es original del blog “Aisha Kandisha” de José Luis Pérez.