Ingredientes:
– 4 filetes grandes de aleta de ternera
– 8 lonchas de queso Cheddar o queso de cabra
– un trozo de calabaza de pulpa naranja
– 2 dientes de ajo
– unas ramitas de tomillo
– unas semillas de comino
– una pizca de ralladura de naranja
– unos granos de pimienta negra
– sal y pimienta negra molida
– harina, huevo batido y pan rallado para rebozar
– aceite de oliva para freír

Preparación:
En el mortero, machacar los dos dientes de ajo con unas semillas de comino, parte del tomillo desmenuzado, ralladura de piel de naranja, unos granos de pimienta y una pizca de sal. Trabajar hasta que tengamos una pasta y desleír con unas gotas de aceite de oliva. Dependiendo del tamaño de los filetes, una vez retirada la grasa, los cortamos en dos o en tres trozos. Se aplanan ligeramente con el mazo y los pintamos con el majado. Tapar con film y dejamos en el frigorífico un ratito para que tomen sabor.

Cuando hayamos limpiado la calabaza de piel, semillas y hebras, con un cuchillo bien afilado, cortamos rodajas de grosor mediano del tamaño de los filetes de ternera. Las asamos en la plancha, de modo que queden tostaditas por fuera y blanditas por dentro. Sobre la mitad de los filetes, colocamos una loncha de queso, añadimos algo más de tomillo y de pimienta, colocamos una rodaja de calabaza y tapamos con otro filete. Cerrar con unos palillos y salpimentar por fuera.

Por último, se pasan por harina, huevo batido y pan rallado, presionando ligeramente para que no se abran. Se fríen en aceite bien caliente, hasta que queden bien dorados por ambas caras. Servir enseguida y acompañar con una ensalada de tomates cherry.

Esta receta es original del blog “¿Qué comemos hoy?” de Laura Vichera.