Ingredientes:
– 2 solomillos ibéricos
– 2 cebolletas
– un puerro, sólo la parte blanca
– unas ramitas de apio
– 2 zanahorias
– zumo de tres naranjas
– 2 cucharadas de harina
– 3 cucharadas de azúcar
– 1 cucharada de vinagre balsámico
– 3 cucharadas de salsa de tomate casera
– un par de vasos de caldo de carne
– un vaso de vino blanco seco
– sal y pimienta negra recién molida
– una cucharada de mantequilla
– aceite de oliva

Preparación:
En primer lugar, limpiar las verduras y se pican muy menudas. Las ponemos a rehogar con la mantequilla y un hilo de aceite de oliva, a fuego suave, para que se ablanden sin dorarse. Precalentar el horno a 190 grados. Cuando estén blanditas, incorporar la harina, damos unas vueltas para que quede bien tostada y agregamos la salsa de tomate. Mojar con el caldo de y el vino y dejamos al fuego durante otros quince minutos, sin dejar de mover.

Aparte, cocer el azúcar con un par de cucharadas de agua. Cuando tengamos un almíbar ligeramente dorado, añadir el vinagre y el resto de zumo de naranja. Emulsionar bien y lo agregamos a la salsa de verduras. Mezclamos y dejamos cocer a fuego suave unos diez minutos. Triturar la salsa y la pasamos por el chino. Dejar a fuego mínimo para que esté muy caliente. Luego, retiramos la grasa de los solomillos, los atamos con hilo de cocina y se colocan en una fuente, salpimentados y regados con un hilo de aceite. Horneamos durante cinco minutos.

Una vez hechos, agregar el resto del zumo de naranja y dejar que reposen en este jugo fuera del horno. Cortamos los solomillos en rodajas al bies y se colocan en una fuente con la salsa aparte.

Esta receta es original del blog “¿Qué comemos hoy?” de Laura Vichera.