Ingredientes:
– 3 solomillos de cerdo de, aproximadamente, medio kilo cada uno
– 4 naranjas medianas
– 3 chalotas
– 2 cucharadas de miel de flores
– un puñado de piñones
– unos granos de pimienta rosa
– unas hebras de azafrán
– sal y pimienta negra molida
– una cucharada de mantequilla
– aceite de oliva

Preparación:
Con un cuchillo bien afilado limpiar los solomillos de grasa y se salpimentan bien por todos lados. Los reservamos en un plato. Pelar las chalotas y se pican menudas en tiras más o menos iguales. Luego, lavar dos de las naranjas y, con ayuda de un acanalador, sacamos tiras finas de piel. Exprimimos todas las naranjas y colar el zumo.

En una cazuela amplia calentamos la cucharada de mantequilla con un chorrito de aceite de oliva. Freír los solomillos a fuego vivo, dándoles la vuelta con cuidado de no pincharlos. Cuando estén bien dorados por todas partes, incorporar las chalotas, las dos cucharadas de miel, el zumo y la ralladura de piel de naranja, las hebras de azafrán, sal y los granos de pimienta rosa.

Vamos sacudiendo suavemente la cazuela de vez en cuando y dejamos a fuego medio durante media hora aproximadamente. En una sartén, sin nada de aceite, tostar los piñones y los reservamos para terminar el plato. Pasado este tiempo, sacar los solomillos bien escurridos de la salsa y se cortan en medallones hermosos. Dejamos la salsa al fuego para que reduzca un poquito y justo antes de apartar, incorporamos los piñones. Servir la carne napada con la salsa y acompañar con pasta larga hervida y una ensalada.

Esta receta es original del blog “¿Qué comemos hoy?” de Laura Vichera.