Cuando hayamos limpiado los chocos, se enjuagan bien y los dejamos escurrir. Luego se pican muy finos a cuchillo y, si fuera necesario, los pasamos por la picadora o se trituran con el robot de cocina...
El día anterior ponemos los garbanzos en agua templada con una pizca de sal para que se pongan tiernos. Al día siguiente, los lavamos con agua caliente y posteriormente, los ponemos en una olla grande con agua a hervir...
La noche previa a la elaboración ponemos los garbanzos en remojo en abundante agua templada con sal. Debemos procurar que nunca pase las 12 horas pues los garbanzos se “encallarían” y se pondrían duros...
Cuando hayamos troceado el pollo, retirar la piel y la grasa, enjuagar y dejamos escurrir. Secar luego con papel de cocina, salpimentar y pasamos por harina...
Una vez limpia de grasa, cortar la carne en dados de tamaño mediano y se salpimentan ligeramente. Pelar las chalotas y se cortan muy finas, en tiras o en aros y se ponen en una cazuela, a pochar, con un chorrito de aceite de oliva...
Doramos la presa ibérica en un poco de aceite en una sartén. La sacamos cuando esté dorada y la reservamos. En ese mismo aceite rehogamos la mitad de la cebolla picada...
En primer lugar, limpiar la carne de grasa y atamos con hilo de cocina. Espolvorear con harina y reservar. Raspar las zanahorias y se cortan en rodajas gruesas. Pelar las cebollas y se cortan en gajos...
Con la punta de un cuchillo retirar la grasa y cortar la carne en dados medianos, todos más o menos del mismo tamaño. Pasar por harina y dejamos en un colador para que quede suelta y no se apelmace...