En primer lugar, atar la carne, salpimentar y rehogar a fuego vivo en una sartén, sin pincharla, dándole la vuelta hasta que se dore bien por todos lados...
Una vez limpia de grasa, atar la carne para que no se deforme al cocer. Le pinchamos los clavos y algunos granos de pimienta y salpimentar. En la cazuela donde vayamos a preparar el lomo, calentar la cucharada de mantequilla con un chorrito de aceite de oliva y freímos...
Partimos en cuatro los membrillos, descorazonamos y pelamos. Los ponemos en una cacerola junto con el azúcar, el cardamomo, los clavos y la canela y cubrimos con el vino...