Cortamos la cebolla muy menuda y la ponemos en una bandeja para el horno. Sobre la cebolla ponemos el conejo troceado, lo salpimentamos y vertemos aceite de oliva por encima y un poco de vino blanco...
Una vez limpios de grasa, aplanar ligeramente los filetes, salpimentar y se reservan. Luego, se van rebozando en harina, sacudiendo para que no queden apelmazados...
Una vez limpio el lomo de grasa, le hacemos unas incisiones alrededor y le metemos dentro los dientes de ajo cortados a lo largo y algunas bayas de enebro...
Ponemos en una sartén un chorrito de AOVE a calentar y añadimos la carne y el ajo en láminas, un poquito de sal y un chorreón de vino blanco y maceramos durante unos 10 minutos, a fuego medio...
Una vez repasado el pescado para eliminar las espinas, cortamos cada uno de los filetes en dos o tres medallones, dependiendo del tamaño. Se pasan a una fuente y rociamos con parte del zumo de lima y limón, ralladura de parte de su piel...
Para el pesto, triturar en el vaso de la batidora o en el mortero todos los ingredientes. Trabajar bien hasta que tengamos una pasta, añadir el queso Parmesano y ligar bien, agregando el aceite de oliva poco a poco, sin dejar de remover...
En principio, trocear el pollo, retirar la piel y la grasa, enjuagamos a conciencia y secar con papel de cocina. Salpimentar cuidadosamente y pasar los trozos de pollo harina. Freír a fuego vivo con un buen chorreón de aceite de oliva hasta dorar...
Primero, limpiar los contramuslos, retirar la piel y la grasa, se enjuagan bien y lo secamos con papel de cocina. Los pasamos a un cuenco con la ralladura de piel de limón, los granos de pimienta rosa machacados, una pizca de sal y pimienta y reservamos en el frigorífico un par de horas...