Ingredientes:

– 80 g de tomates secos
– 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
– Un diente de ajo
– Unas 15 aceitunas negras
– 70 g de queso de cabra
– 2-3 cucharadas de queso crema
– Un chorreón de zumo de limón
– Unas hojas de albahaca
– Hierbas provenzales
– Pimienta

Preparación:

Lo primero que tenemos que hacer es hidratar los tomates secos. Dependiendo del tiempo que tengamos, podemos dejarlos un par de horas en agua o bien ponerlos en un cazo con agua caliente (sin que llegue a hervir) durante unos 30 minutos. También podemos ponerlos en agua hirviendo durante 10 minutos aunque, de este modo, perderán algo más de sabor. Cuando estén hidratados, escurrimos los tomates secos y los ponemos en la picadora, robot de cocina o vaso de la batidora, junto con las aceitunas, las cucharadas de aceite de oliva y el diente de ajo. Trituramos todo hasta obtener una pasta medianamente homogénea.

Incorporamos el queso de cabra y el queso crema. Volvemos a triturar hasta que esté todo bien mezclado.Por último, añadimos hojas de albahaca al gusto, el zumo de limón y las especias. Le damos otro golpe de triturado sin pasarnos, que se vea que hay algunos trocitos de albahaca. Servimos la tapenade de tomates secos y queso de cabra acompañado de lo que más nos guste para picotear: picos, regañás, tostas, nachos, crudités…

Si quieres ver las imágenes del proceso, pincha aquí para ver la entrada completa en el blog de Guillermo Osorio ‘No me comes nada.