Ingredientes:
– 200 grs de chocolate negro
– 3 huevos
– 150 grs de azúcar
– 150 grs de mantequilla a temperatura ambiente
– 50 grs de harina
– unas bayas de cardamomo
– unas gotas de esencia de vainilla
– algo más de mantequilla para el molde
– azúcar glas para la presentación

Preparación:
Con un cuchillo abrimos las bayas de cardamomo y sacamos las semillas de dentro. Se machacan en el mortero hasta dejarlas reducidas a polvo y se reservan. Precalentar el horno a 170 grados. En un cuenco, al baño María, ponemos el chocolate troceado con un par de cucharadas de agua, a fuego suave y lo vamos moviendo, hasta que funda.

A continuación, en otro cuenco, trabajamos la mantequilla con unas varillas, agregamos el cardamomo molido y la esencia de vainilla. Agregar poco a poco el azúcar y continuar moviendo hasta que tengamos una mezcla cremosa y blanquecina. Uno a uno, vamos añadiendo los huevos y también la harina a cucharadas. Hay que trabajar bien la masa después de incorporar cada uno de los huevos para que se traben bien todos los ingredientes. Podemos hacerlo con varillas eléctricas.

Por último, incorporar el chocolate fundido, mezclar nuevamente y dejamos reposar media hora en el frigorífico. Sobre un molde ligeramente engrasado con una pizca más de mantequilla, volcamos la mezcla y sacudir para que no queden huecos. Hornear durante media hora, debe quedar blandita por dentro y con una costra crujiente por encima. Cuando esté hecha, dejamos enfriar del todo antes de desmoldar sobre una rejilla. Una vez fría del todo, la pasamos a una bandeja y espolvorear generosamente con azúcar glas. Acompañar con nata, sin azúcar, ligeramente montada.

Esta receta es original del blog “¿Qué comemos hoy?” de Laura Vichera.