El grupo Volkswagen esconde un pequeño secreto (del todo conocido en Alemania, y no tanto en España): tiene su propia línea de salchichas y ketchup. Se trata de un tipo de salchicha, la Currywust o salchicha al curry, que la compañía lleva fabricando desde finales de los años 30. En un primer momento la potente marca alemana ideó las salchichas y el condimento a base de tomate para abastecer de comida a los trabajadores de sus fábricas.

Actualmente las cafeterías y comedores de las factorías siguen sirviendo las currywust. Pero, las salchichas y el ketchup han gustado tanto y se han hecho tan célebres que han conseguido dar el salto a las estanterías de los principales supermercados alemanes. En el año 2011 se estima que se llegaron a vender casi cinco millones de unidades de la salchicha, y casi medio millón de botellas de ketchup. La planta de salchichas de Wolfsburgo abastece al país de estos dos ingredientes básicos de la dieta teutona. Audi, llegó a tener su propia versión, la Weisswurt.