Ingredientes:
– 250 grs. de azúcar en polvo (se puede comprar pero yo he cogido azúcar normal y lo he pasado por la batidora).
– 6 huevos
– 600 grs. de queso mascarpone
– Bizcochos de soletilla (2 por persona)
– Café (2 vasos grandes de café, algo menos de ½ litro aprox.)
– Cacao en polvo

Preparación:
Separa las claras de las yemas de los huevos. Introduce todo el azúcar en un bol junto a las yemas. Bátelo hasta que quede con un color amarillo pálido tirando a blanco (yo lo he hecho a mano pero si tienes una varilla eléctrica ahorrarás bastante tiempo y esfuerzo). Agrega el queso mascarpone y bate hasta que quede una pasta consistente cuidando de no dejar grumos. Reserva en el frigorífico durante media hora.

En otro recipiente, bate las claras a punto de nieve y agrégalas suavemente a la mezcla de yemas, mascarpone y azúcar. Con una espátula envuelve suavemente las claras en la mezcla hasta que queden completamente incorporadas. Cogemos una copa e introducimos los ingredientes de la siguiente forma:

  • Una pequeña base de la mezcla anterior
  • Un poco de cacao en polvo
  • 2 bizcochos de soletilla (por copa) mojados ligeramente en el café caliente.
  • Una capa que cubra toda la copa
  • Cacao en polvo para decorar.

Como veis el resultado ha quedado bonito y, a juzgar por los comentarios del personal que se los ha comido, deliciosos.

Esta receta es original del blog “No consigo cocinar” de Alberto Blanco.