El Hotel Vincci La Rábida inauguró la pasada primavera su nuevo establecimiento hostelero Tapas & Bar La Rábida. Amparado por el éxito de su restaurante El Mirador, el hotel apuesta ahora por la cultura de la tapa, eso sí, con la calidad en sus ingredientes como máxima y con la presentación en el emplatado como seña de
distinción. Al frente de su cocina, el chef sevillano Alberto Garrido. Tras formarse en Sevilla y trabajar en distintos establecimientos, llegó a la cadena hotelera Vincci en 2008. Tanto para los clientes hospedados como para los que no, este bar abre sus puertas a quienes quieran disfrutar de las reconocidas tapas sevillanas con un toque gourmet. Desde pimientos del piquillo rellenos de cola de toro, croquetas de boletus con mayonesa de foie, tataqui de atún, bacalao frito con alioli hasta salteado de ternera al ajo, la variedad de tapas es extensa aquí, así como su carta de vinos.

“Tenemos un menú que hemos llamado Destápate, que por 15 euros permite degustar dos tapas más bebida y postre“. Una opción más económica, adaptada a los bolsillos más ajustados, que puede disfrutarse en un entorno único, bien en un patio típico sevillano o el moderno interior de este tapas bar. “Aprovecho este espacio para probar mis inquietudes en la cocina. Si funcionan como receta las paso al restaurante El Mirador, una espectacular terraza con vistas a la Catedral”.

Fuente: Ana Fernández