Separar las claras, se montan a punto de nieve fuerte con una pizca de sal y se reservan en el frigorífico. Lavar los albaricoques, retirar el hueso y se rebozan en un par de cucharadas de azúcar...
En un bol, diluimos la levadura en 100 ml. de agua tibia. Mezclamos la harina junto con los azúcares, la sal, la leche en polvo, la levadura diluida y 200 ml. de agua tibia. Amasamos todo durante 5 minutos...
En primer lugar, ponemos el pan en agua fría para que se ablande. Ponemos en un vaso de batidora las almendras, los dientes de ajo y la sal y lo trituramos todo...
Con unas varillas batimos bien la mantequilla y los dos tipos de azúcar hasta que se forme una crema blanquecina. Añadimos los huevos y la vainilla y seguimos batiendo hasta que esté bien integrado...
Lavamos y cortamos las verduras: la cebolla picada finita, las judías en juliana y el calabacín en trozos, al igual que los champiñones. Ponemos en una sartén con un chorrito de AOVE a rehogar la cebolla, junto con la hoja de laurel...
Rehogamos en aceite de oliva los pimientos, la cebolla, los tomates y los ajos picados junto con la hoja de laurel. Cuando esté hecho el refrito se retira el laurel y se pasa por la batidora...
Hacer un majado en el vaso de la batidora, poniendo el ajo y la mitad del aceite, junto con un poco de orégano, tomillo, comino, pimentón dulce, cilantro, pimienta negra, sal y perejil...
Ponemos todas las verduras a la vez con un hilito de agua, sal y dejamos que se cocinen en su propio jugo. Después añadimos una pizca de pimienta negra, ajo, cebolla en polvo y jengibre fresco...